El momento de dar el gran paso para pedir matrimonio a la persona que amas es algo muy importante en la vida de una persona. En ese sentido, hacerlo con el anillo de compromiso adecuado es fundamental para lograr que el momento sea perfecto. Esto lo entendieron Laia y Joanju, que eligieron a Grau como el compañero de este momento tan único y especial.
Una pedida planificada en Navidad
De alguna manera, la pareja ya había hablado alguna vez sobre el matrimonio y compartían objetivos de vida comunes. No obstante, no fue hasta fines del 2021, en particular en la Navidad de ese año, cuando Joanju empezó a planificar los detalles para hacer una pedida perfecta. Para esta Navidad, regaló a Laia unos vuelos para viajar a la Toscana, sin que ella pudiera imaginar que allí encontraría la sorpresa de su vida.
Joanju había encontrado una cómplice en la Toscana que fue quien lo ayudó a planificar todos los detalles para cuando llegara el momento.
Joanju contó que, durante ese tiempo, vivió todo con una gran ilusión, emoción y muchos nervios también. El 1 de junio, cuando se encontraban realizando la recta final del viaje, se dirigían en coche a la que debía ser una cata de vinos locales, vistiendo elegantes con la excusa del viñedo y la puesta de sol. La emoción iba creciendo en Joanju a medida en que el momento se acercaba y, cuando llegaron, se encontraron con un bello hotel con jardines idílicos que les recordaban a los Jardines de Santa Clotilde de Lloret de Mar y fueron recibidos por la cómplice, que los acompañó hasta la zona en la que, se suponía, se llevaría a cabo la cata.
Al llegar, se encontraron rodeados de un maravilloso lago con un puente y un camino de velas que daba acceso a una pequeña isla decorada con flores y más velas. Allí, Laia se dio cuenta de lo que estaba a punto de pasar y caminó hasta la isla acompañada por Joanju que, después de unas emotivas palabras sobre su tiempo juntos, colocó una rodilla en el suelo, mostrando su caja de Grau con un impresionante anillo de compromiso e hizo la pregunta. Laia no dudó un segundo.
Un anillo de compromiso repleto de historia
La familia de Laia había tenido desde siempre una cercana amistad con la familia Grau. Si bien tenían también una buena relación con la familia de Joanju, fue a raíz de que Laia cuidaba al pequeño de la familia Grau en verano, que fue construyendo un vínculo más estrecho y cercano con la firma. Esto fue lo que hizo que Joanju no dudara en qué firma elegir a la hora de buscar un anillo para pedirle a Laia que se casara con él.
Desde el comienzo, cuando decidió que le pediría matrimonio a Laia, Joanju tuvo muy claro que el anillo tenía que ser de Grau, tanto por su relación y amistad con la familia como por el gusto que ya tenía por los diseños de anillos de compromiso de la marca. Por eso, al tomar esta determinación, decidió ponerse en contacto con la firma en Navidad, para poder crear el anillo mágico.
Los resultados fueron los esperados. Laia consideró al anillo de compromiso como una verdadera joya que no podía ser más fina y elegante, como a la vez diferente, siendo un anillo único y realmente especial para ella; para ambos.
El sueño mutuo de Laia y Joanju seguirá el próximo año, dando el sí quiero rodeados de sus familiares y amigos, celebrando el amor, la vida y todo aquello que hay por venir, el mismo día que se conocieron hace 6 años y en su lugar favorito: Los jardines de Santa Clotilde de Lloret de Mar.