Estos pendientes de la colección Perla de Grau combinan la sofisticación eterna del oro blanco con la serenidad de una perla de 7 mm, cuidadosamente seleccionada por su brillo y pureza. Cada perla está abrazada por una fina orla de diamantes que suma 0,22 ct, aportando un resplandor sutil y exquisito. Su diseño de botón garantiza un porte cómodo y elegante, perfecto para acompañar tanto looks diarios como estilismos más formales. Una joya femenina, atemporal y refinada que encarna la delicadeza natural de la perla elevada por el destello del diamante.