Se trata de una delicada pulsera de plata de ley, adornada con una pequeña flor de circonitas azules. A simple vista, puede parecer una pieza sencilla, pero les aseguro que su encanto reside en los detalles. La plata de ley, bañada en rodio para evitar el deslustre y aumentar su durabilidad, aporta un brillo sutil y elegante que realza la belleza natural de la piel. La circonita azul, por su parte, destaca por su luminosidad y su capacidad para reflejar la luz, creando un efecto deslumbrante en cada movimiento de la muñeca.