La fuente de inspiración para este reloj Seiko de 40mm se remonta a los inicios de la relojería en Japón, específicamente al año 1964. En ese año, Seiko presentó el primer cronógrafo japonés, coincidiendo con un evento deportivo de gran relevancia en Tokio. La influencia de este hito histórico se refleja con maestría en el diseño de este reloj Presage donde destacada el movimiento 4R57, con subesfera en la posición de las 6 en punto. La esfera del reloj para hombre se presenta en un seductor tono marfil, un fondo perfecto para resaltar los detalles y las sutilidades del cronógrafo. La elección de una correa de acero inoxidable y un bisel en contraste es un guiño a la sofisticación y durabilidad que caracterizan a la marca Seiko.