Los pendientes Bouquet de Grau son una celebración de la naturaleza convertida en joya. Cada pendiente está formado por cuatro esmeraldas talla corazón, cuidadosamente seleccionadas por su intensidad verde y su brillo cautivador, que se disponen en forma de flor para crear una composición viva y armoniosa. En el centro, un diamante perfectamente engastado actúa como punto de luz, aportando equilibrio, contraste y un destello final lleno de sofisticación. El oro amarillo que envuelve la flor acentúa la calidez de las esmeraldas y potencia la luminosidad del diamante, dando vida a una pieza que irradia feminidad, elegancia y una belleza orgánica inconfundible.